Políticas de igualdad
Las propuestas abolicionistas suscitan dudas en Podemos y no forman parte del programa del Ministerio de Igualdad
Calvo levanta un nuevo muro frente a Montero y anuncia una ley estatal que prohíba la prostitución
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha anunciado este domingo una próxima legislación nacional abolicionista que prohíba la prostitución en toda España y que “nos dignifique como democracia”.
Calvo enarbola así una bandera ampliamente defendida desde el feminismo socialista, pero que, sin embargo, suscita muchas dudas en la dirección de Podemos, socio minoritario del Gobierno. “Seguramente no habrá unanimidad, pero sí grandes movimientos de mayorías”, ha advertido. “En el PSOE estamos en esta lucha”, ha destacado Calvo en la jornada telemática contra la trata y la prostitución, “en la que a este país le va la calidad democrática”.
La vicepresidenta ha marcado así una frontera clara entre la postura indubitada que los socialistas tienen en este terreno frente a la vacilación y el debate abierto que se sigue manteniendo en la formación morada, que hace un año se distanció incluso de su hermano de coalición, Izquierda Unida, absteniéndose en la votación de la proposición no de ley que reclamaba al Gobierno una ley abolicionista, una iniciativa que no forma parte del programa que desarrolla la ministra de Igualdad, Irene Montero.
De hecho, los socialistas reclaman no fijarse tanto en el Convenio de Estambul, la biblia del Ministerio de Igualdad, y apoyarse más en el Convenio de Nueva York, que centra la mirada en el proxenetismo como clave de la trata de mujeres y niñas.
“Los prostíbulos son guantánamos”
“Hay trata porque hay prostitución”, ha afirmado Calvo, para quien la prostitución es un “elemento fundante del patriarcado” en la medida en que “cosifica a las mujeres como mercancía que se puede comprar y vender”. “La prostitución”, ha defendido, “no es un trabajo, es una esclavitud”.
El abolicionismo tiene una historia larga que mantiene que no es posible construir una sociedad democrática con mujeres prostituidas y esclavizadas. “Allí donde se regula la prostitución, la trata ha crecido”, ha afirmado la vicepresidenta oponiéndose así a cualquier tipo de legalización de lo que algunos defienden como un “espacio de libertad para las mujeres”, algo que, en su opinión, “no es más que un engaño”.
“Los prostíbulos son guantánamos de cercanías en los que las mujeres están en un limbo alegal”, ha afirmado antes de asegurar que el PSOE irá con una propuesta de ley para prohibir la prostitución y espera que todas las mujeres que se sientan en el Congreso y el Senado acompañen la iniciativa.
“No nos dejaremos llevar por los cantos de sirena que esconden esta realidad tras palabras nuevas que defienden que las mujeres están en esto porque son dueñas de sus cuerpos”. Todo esto oculta “viejas ideas nada respetables”, ha afirmado.
Llamamientos a las autonomías
Carmen Calvo también ha anticipado la voluntad del Gobierno de reforzar la educación sexual y reproductiva para no dejarla en manos de la pornografía. “No hay más libertad que la que se asienta en la responsabilidad”, ha dicho haciendo hincapié en que se “llamará a la puerta de las comunidades autónomas, de los ayuntamientos y Europa para conseguir todo esto”.
“No queda otra”, ha recalcado, “que hacer política y mover todas las piezas utilizando toda la legislación existente, las políticas sociales, educativas, sanitarias y de protección. Y hacerlo en todos los ámbitos desde el Gobierno de la nación a los ayuntamientos”.
En este sentido, y aprovechando el clima preelectoral en Madrid, Calvo ha afirmado que sería idóneo que la Comunidad de Madrid, con Ángel Gabilondo al frente, “se incorpore a la red de autonomías que no eliminan políticas de igualdad y que no doblegan la agenda feminista como política de Estado”.
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