Chelsea 2 – Atlético 0
El charrúa, que aún no se ha marcado en Europa con el Atlético, se marchó molesto tras ser sustituido con media hora por delante
Luis Suárez, tras ser sustituido frente al Chelsea.
REUTERS
Con una afilada sonrisa se marchó Luis Suárez a la grada, cuando aún quedaba media hora de esperanza. No es que el uruguayo lo estuviera bordando, pero es quien mejor entiende el idioma del gol en el Atlético. Así que, el ariete contempló desde su asiento, acaso ajeno al frío londinense por el calentón, cómo se acababa consumando una tragedia para la que su equipo nunca llegó a encontrar un remedio. «Es normal que el futbolista quiera seguir jugando. Entendimos que con otros teníamos otra vía para poder atacar y por ello lo hicimos», resumía el asunto Simeone, que veía cómo Europa volvía a escaparse entre sus manos. Luis Suárez acumula ya 25 partidos fuera de casa sin marchar y aún no se ha podido estrenar como rojiblanco en Europa. Aquella noche en Roma de 2015 parece formar parte de otra vida.
En la búsqueda de un último aliento sacrificó el argentino a su goleador, que lleva ya unos cuantos años viendo cómo la Champions le vuelve el gesto. Roma, Liverpool, Turín, Lisboa… El caso es que, un año después de la gesta de Anfield, el Atlético regresó a Madrid de vacío. Con la sensación de haber estado siempre a un par de metros del Chelsea. En Europa la vida es mucho más complicada que en casa.
En ningún momento encontró Simeone un plan adecuado, a pesar de que probó con todo lo que tenía en el banquillo. Partió con un 4-4-2, se agarró al 5-3-2 y acabó con tres mediapuntas arropando a Dembélé. Uno de ellos, Joao Félix, que arrancó un buen puñado de halagos del argentino, consciente de que por su conexión en este final de temporada pasan buena parte de las opciones para poder asaltar la Liga. «Me quedo posiblemente con el mejor partido de Joao desde que está en el equipo. Éste es el jugador que queremos», proclamaba un día después de compartir mesa y mantel con el portugués en la sala de prensa de Majadahonda. Allí también le regaló alguna flor. «No queríamos quedar fuera en la Champions, que este año nos costó desde el arranque, pero hay cosas que pueden ser buenas para el futuro. Hoy lo de Joao fue muy bueno», prosiguió el argentino.
El joven portugués desplegó sus alas lo poco que le dejó el Chelsea. De sus botas nacieron las mejores ocasiones y, a diferencia del partido de ida, se abrazó al balón para conducirlo al área de Mendy. No hubo mucho más que rescatar de un nuevo borrón rojiblanco en Europa. Si en diciembre el bombo pareció sonreírle, en marzo ha acabado desvelando que la distancia entre la Premier y la Liga es hoy notable. El líder en España nunca tuvo a su alcance al cuarto clasificado en Inglaterra, que navega a 20 puntos del City.
“La Premier tiene más intensidad”
«Todos teníamos mucha ilusión en esta competición, pero siempre hemos ido a remolque. En la ida no estuvimos como deberíamos», admitía Koke, superado en la medular junto a Saúl por el colmillo y el físico de los jugadores azules. «En la Premier es una intensidad diferente a la que se juega en España. Se ha visto que en muchas fases hemos sido superiores», explicaba Azpilicueta, capitán del Chelsea, tras lograr su primera clasificación para cuartos de final desde 2014, cuando fueron apeados precisamente por el Atlético.
Así se cerró una Champions que arrancó torcida para el Atlético, con aquella sonrojante goleada en Múnich (4-0), prosiguió con su impotencia ante el Lokomotiv, pareció enderezarse tras salir ileso de su inesperada final invernal en Salzburgo y acabó sepultada en Londres, sin haber podido siquiera pisar el Wanda Metropolitano por cosas de la pandemia. Tras el zarpazo del Leipzig en Lisboa, en cuartos de la pasada temporada, llega ahora el epitafio en Stamford Bridge. El final de una ilusión y el principio de una obligación. Porque a los rojiblancos ya no les queda otra que mirar de frente a la Liga. «Hay que resetear y pensar en lo que viene por delante», zanjaba Simeone antes de tomar el avión de regreso. De volver a empezar.
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